jueves, 1 de diciembre de 2011
Bolivia Stone: un rival a pura música
El artículo que sigue es del 29 de junio de 2011, en vísperas del partido inaugural de la Copa Ámerica en el que Bolivia consiguió un magnífico empate frente a la selección del país anfitrión, Argentina. Se recuerda este partido, también, por el intercambio de palabras entre Raldes y Messi, forcejeo incluido.
Por: MATÍAS BUSTO MILLA
Camino suavemente, a paso lento, a media máquina. Enciéndelo!
La traducción, tal vez, saca todo el encanto de uno de los riffs más escuchados del mundo del rock and roll. En Benavídez, bien lejos del Londres que los vio nacer hace casi 50 años, suenan The Rolling Stones.
No es un concierto. La soledad de alrededor marca que Mick Jagger no está físicamente presente, aunque su voz, inconfundible, le pone calor a una fría mañana de martes. El contexto, claro, es bien distinto. Es en el entrenamiento de la Selección de Bolivia en donde fluye la música para marcar el comienzo del trabajo físico intenso.
Entonces lo curioso, de pronto, se vuelve una perfecta analogía. Los jugadores, en grupos, arrancan su caminata, a paso lento, y empiezan a darle intensidad al trote en una de las canchas del predio en donde encaran la última parte de la preparación para el encuentro del viernes, en La Plata.
Para el primer rival de la Argentina en la Copa América, el sonido de los acordes partiendo de la guitarra de Keith Richards ya se volvió algo normal. Es que el preparador físico del plantel, Rodrigo Figueroa, decidió que en el aire haya algo más que indicaciones sobre la pelota y por eso se encarga de musicalizar cada una de las prácticas del equipo de Gustavo Quinteros.
No deja de ser una novedad, pero los futbolistas ya entienden cómo funciona. No hay un silbato para que todo empiece. El Play del equipo de música sirve de señal para ellos, que en un clima distendido, se animan a pedir por alguno de los clásicos de los Stones. "Profe, ponga la que es más lenta, así vamos más despacio", bromean a la distancia. La lenta a la que se refieren es "Beast of burden".
La práctica sigue con algunas indicaciones tácticas de Quinteros, el entrenador que, gran admirador de Marcelo Bielsa, permitió esta licencia porque considera que "contribuye a generar un clima de trabajo distinto. La música siempre nos acompaña y eso muchas veces relaja a todos". La mirada indaga un poco más y el oído se hace más sensible. Espera la pelota el delantero Marcelo Martins, en tanto que "Brown Sugar" es el tercer clásico de la banda inglesa que invade el silencio en Benavídez. Luego llegarán los ejercicios en espacios reducidos y los ensayos informales de fútbol.
Siempre alineados a la música andina, el rock y Bolivia encontraron un punto de encuentro. El desarrollo de este estilo aumentó con los años, algo que llevó a organizar festivales en los que participan muchas bandas argentinas.
El sol del mediodía le da un nuevo matiz a la escena. Fútbol y música para la Selección de Bolivia.
En la cabeza, claro, está el duelo con Argentina. La presión del partido inaugural, el desafío de sortear al anfitrión parecen minimizarse en la conexión con el sonido.
El trabajo no para. Ni el DT ni los jugadores se salen del eje. Al ritmo de los Rolling Stones, Bolivia intenta que su fútbol se encienda.
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Es como cuando corres 800 metros con vallas y te ponen "Jumpin' Jack Flash" (Jack El Saltarin) y corres sin pensar en cansancios. Te das cuenta que te falta el aire cuando estas en el podio recibiendo alguna medalla... y funciona! :)
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